Juan Verde, en un momento de su intervención. | Jaume Morey

Juan Verde, presidente de Advanced Leadership y consultor de empresas y gobiernos –trabajó en la administración Obama en Estados Unidos–, recalcó que «el cambio climático es la mayor amenaza para la estabilidad económica. Algunos dicen que, tras una crisis económica, sanitaria y bélica, no es el momento de la sostenibilidad. No es una cosa o la otra. Sostenibilidad y economía van juntos porque sin planeta, no hay economía. Estamos en un momento histórico en el que podemos plantearnos un futuro de bajas emisiones, sostenible, equitativo y justo».

La apelación del consultor fue expuesta con datos: «El Banco Mundial prevé para 2030 que más de cien millones de persones pasen a encontrarse en una situación de pobreza como consecuencia del cambio climático. Y el Foro Económico Mundial reconoce que de las diez mayores amenazas para el planeta, cinco están relacionadas con el cambio climático. El agotamiento de los recursos naturales, la pérdida de biodiversidad y las catástrofes naturales y medioambientales tienen un coste cada vez mayor. La buena noticia es que la transición hacia un modelo económico de bajas emisiones se ha puesto en marcha, pero vamos demasiado lentos». En este sentido, Verde explicó «el gran potencial de la inversión en sostenibilidad. Actualmente, el dinero va hacia lo verde y el verdadero motor es el sector privado, concretamente el financiero. Los grandes bancos y grupos financieros han dejado de invertir donde no hay impactos positivos para el medio ambiente. Es lógico. Lo contrario no tendría ningún sentido. Incluso las bolsas apuestan por la sostenibilidad y las empresas verdes, mucho más que por las convencionales».

Siguiendo esta línea, Juan Verde indicó que «desde 2009, se invierte mucho más en energías verdes que en las fósiles. Espero que a mi hija, cuando sea mayor, tenga que explicarle qué son un carburador y un motor de combustión». Más datos aportados por Verde: «En 2016 había un millón de vehículos eléctricos en el mundo; ahora hay 32 millones y la previsión apunta a que, en 2040, el 65 % de todos los coches vendidos serán eléctricos. Noruega ya está a tres años de prohibir la venta de coches de combustión». El consultor también habló de las cuestiones laboral y social: «Las empresas dedicadas al carbón y el petróleo pueden perder millones de empleos en todo el mundo, mientras que las dedicadas a las renovables harán todo lo contrario. Mientras tanto, la mayoría de consumidores ya da importancia a los productos sostenibles y está dispuesto a pagar más por ellos y a cambiar de hábitos».